RESTAURACIÓN DE MARFIL
PAREJA DE COLMILLOS TALLADOS
Los cuernos de marfil, siempre han sido un objeto de decoración muy valorado, tanto como por profesionales del sector como por usuarios particulares. Se denomina marfil al colmillo de elefante, muy compacto, que permite llevar a cabo un talla muy detallada, admite un alto grado de pulimento y es translucido en laminas finas.
Se ha denominado también como marfil a otros materiales parecidos, duros y de color blanco o cremoso, como los colmillos de narval, de morsa, de hipopótamo o de mamut fósil. Muy a menudo también se confunde el marfil con objetos de hueso pulido, sobre todo en aquellas piezas en las que nos encontramos partes realizadas en hueso con partes realizadas en marfil (por ejemplo en la base), que dan lugar a confusión por parte de los coleccionistas.
Por último entra en juego la resina (o plástico) que mediante moldes imitan piezas originales pero cuyo material no vale nada en el mercado.
A la hora de diferenciar entre estos tres materiales podemos tener dificultades, sobre todo entre el marfil y el hueso. El marfil suele tener unas líneas paralelas como las que se forman en el interior de un tronco al hacerle un corte transversal, aunque algunas veces son tan sutiles que es necesario verlas con lupa, aunque el no verlas no significa que no lo sea. Suele ser muy suave y brillante, aunque algo amarillento, pero a veces lo han tratado con aceites y se vuelve con un ligero tono marrón. El hueso suele ser un material más poroso y presenta puntos u hoyos oscuros, aunque a veces se blanquea la pieza y no se aprecia.

Como relata la sala de subastas Setdart en un artículo de octubre de 2018, hoy en día la venta de marfil se rige por un acuerdo internacional sobre protección de especies, conocido como CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres).
En esta entrada vamos ha hablar de dos piezas genuinas realizadas en marfil mono-bloque (de una sola pieza) que llegaron a nuestro taller con varias zonas fragmentadas. Se trata de una pareja de colmillos tallados, una figura masculina y otra femenina, colocadas en un soporte de madera tallada. Estas piezas pertenecen al arte chino y podrían datarse a lo largo del siglo XIX, durante la Dinastía Qing (1644-1911).
En los inicios del arte chino, el marfil se empleó sobre todo como taraceado decorativo, por lo que no se conservan muchas piezas anteriores al periodo de la dinastía Ming, pues la talla figurativa no se desarrolló hasta llegado el s. XVI, ya con la dinastía Qing.
Estas figuras representan a Avalokiteshvara (el bodhisattva budista) y a la diosa Guanyin, que están relacionadas con la protección, tanto de los individuos como de los hogares. También se usan para atraer buena energía y los deseos de buena fortuna, iluminación, longevidad…

El proceso de restauración se basó en el pegado de los fragmentos rotos, la reintegración de aquellas zonas en las que se había perdido material original, la aplicación de color y por último la protección. Además también se realizó una limpieza superficial para eliminar suciedad acumulada por el paso del tiempo.



Para saber más: CITES, Identificación de marfil, ¿hueso o marfil?, procedencia de las tallas de marfil, El País, subastas duran, ceres, Museo Nacional de Artes Decorativas.